Este artículo contiene las traducciones idiomáticas de un artículo originalmente publicado por el excelente sitio Return to now, y de otro a titulo complementario originalmente publicado por el sitio MOTHERBOARD, exponiendo ambos el mismo tema.
No es el « fin del mundo », es sólo el fin del mundo como lo conocemos… y quizá eso es algo bueno.
Los niveles atmosfericos de carbono llegaron a lo que algunos científicos denominan como Tipping Point (« punto de inflexión, irreversibilidad… ») –, este es el punto a partir del cual ninguna reducción en la cantidad de gases a efecto invernadero nos salvará de un potencial calentamiento global catastrófico.
El mes de Marzo marcó la primera vez en que los niveles de carbono se mantuvieron igual o superiores a los 400 ppm (Partes por millón) durante un mes consecutivo, y como para fines del mes de septiembre (cuando por lo general los niveles de carbono disminuyen), el Scripps Institute of Oceanography (« Instituto de Oceanografía Scripps ») predice que no volveremos a ver un promedio mensual por debajo de los 400 ppm en todo el año o « indefinidamente » (NdT : predicción fundada en la observación de los niveles de CO2 del Observatorio de Mauna Loa en Hawaii, seguida muy atentamente desde 1958).
La última vez que los niveles de CO2 estuvieron a estos niveles – hace al menos 4 millones de años – los humanos no existían, advierte una organización internacional medioambiental llamada 350.org, que señala que unos niveles de CO2 superiores a 350 ppm son insustentables a largo plazo.
Si bien no esta claro cómo los niveles superiores de carbono puedan causar que el ser humano deje otra vez de existir, los científicos han estado advirtiendo desde hace mucho tiempo sobre la inminente aproximación a los 400 ppm como una « señal aminosa » de estos tiempos.
¿¿Ciao Mundo??
« Es una semana espectacular para el fin del mundo, ya que oficialmente hemos empujado los niveles atmosféricos de carbono más allá del temido limite de 400 partes por millón – de forma permanente », escribió la semana pasada Sarah Emerson en un artículo para Vice titulado “Goodbye World : We’ve Passed the Carbon Tipping Point For Good (« Adios Mundo : Hemos cruzado el punto de inflexión de forma permanente »).”
Tras enumerar algunos de las terribles consecuencias de nuestro nuevo punto de referencia de CO2 – una tasa de extinción de especies sin precedentes, perturbación de la cadena alimentaria, aumento del nivel del mar, megatormentas, acidificacion oceanica y blanqueamiento de las barreras de coral – Emerson propone un « lado positivo » – que este nuevo récord podría ser el punto en el que « toquemos fondo », el punto que impulse a las personas a actuar.
Y no se equivoca – en la historia de nuestra cultura de destrucción rampante del mundo vivo, este es un momento particularmente aleccionador y de reflexión – pero no estoy de acuerdo con el uso que hace de la palabra « permanente », y su sugerencia de que el mundo se está acabando.
No es la única que lo menciona. Existen muchos titulares – aquí, aquí y aquí – que dicen que hemos golpeado el punto de « no retorno », pero nadie ha dicho lo que significa el « no poder retornar ». Por su puesto que no podremos regresar al estilo de vida en el que hemos vivido los últimos 200 años, y tal vez incluso al de los últimos 10.000 años, pero no porque la civilización se esté acabando, equivalga a que la Tierra, e incluso algunos humanos, no podrán seguir sin ella.
Considero que es sólo honesto reconocer la desolación de la situación actual. Todo el fenómeno anarquista-nihilista – al que cada vez más de nosotros dentro del entorno « radical » resulta identificarse – está fundado sobre el absoluto desastre que es la civilización, especialmente la civilización industrial. Los izquierdistas, derechistas, ambientalistas, liberales, feministas, pacifistas, y lo que sea – todos estos grupos han dejado pasar actos cotidianos de destrucción ecológica prácticamente sin oposición. Han peleado por victorias menores y temporales, que han servido para pacificarnos respecto a perdidas permanentes.
Pero tal vez admitir la severidad de nuestro futuro, sea el primer paso para cambiarlo. Derrick Jensen señala que « cuando la esperanza muere, la acción comienza ».
« Algo maravilloso ocurre cuando pierdes la esperanza, primeramente te das cuenta que nunca la necesitaste. Te das cuenta que perder la esperanza no te mata. Ni siquiera te vuelve menos efectivo. De hecho, te vuelve mas efectivo, ya que dejas de depender de alguien o algo mas para que resuelva tus problemas — dejas de esperar que tus problemas de alguna manera se resuelvan mediante asistencia magica de Dios, la Gran Madre, el Sierra Club, de los valientes cuidadores de arboles, el bravo salmon, o incluso la Tierra misma — y entonces tan solo comienzas a hacer lo que sea necesario para resolver tales problemas por ti mismo ».
Es cada vez más probable que para el 2030, la economía mundial colapse, arrastrando consigo las instituciones que contribuyen al colapso ecológico inminente (si tenemos suerte).
Si aceptamos los argumentos de los paleontólogos (lo que personalmente hago), la Tierra ya ha enfrentado 5 extinciones masivas, como la que estamos viviendo hoy. Durante cada una de estas, innumerables formas de vida lucharon contra la situación y superaron las « imposibles » condiciones por las que atravesaron, sin importar la « vaguedad » que les deparase el futuro. Lucharon por la vida y se afanaron a vivir tanto como les fue posible. ¿Porqué debiera ser diferentemente ? Como indican los situacionistas – « ¡sé realistas, pide lo imposible ! »
Si abandonamos la esperanza depositada en poderes exteriores a nosotros y empezamos a tomar acciones reales, finalmente podemos ponerle un alto a esta cultura de muerte que se mantiene funcionando aún en su última etapa, y tal vez, crear un mundo donde la vida se trate de saber prosperar y florecer en vez de sobrevivir a duras penas.
Ya sea mediante grupos como el Niger Delta Avengers, Reacción Salvaje, Earth First, Hunt Sabs etc, actos individuales de resistencia, como la permacultura o rewilding (« resalvajización »). Existen multitud de formas en que podemos apoyar el colapso económico y proteger lo que queda del entorno natural. Nuestra imaginación no necesita limitaciones impuestas por la historia, puesto que existimos en el presente. El futuro todavía no ha sido determinado. No necesitamos decirle adiós al mundo, ni a nosotros.
Julian Langer
Langer es un ecologista radical, activista de terreno, escritor eco-anarquista y miembro de Deep Green Resistance. Se graduó en psicología y filosofía.
[…] En 2012, el Ártico fue la la primera región del globo en cruzar la linea roja. Tres años mas tarde, por la primera vez, la concentración de carbono en la atmósfera se mantuvo por arriba de los 400 ppm durante un mes consecutivo.

Esta vez, los expertos estiman que los niveles de CO2 no volverán a disminuir. Esta afirmación es atribuida a la naturaleza cíclica de la evolución en la concentración de CO2 observada en Mauna Loa ; cada año, los niveles de CO2 son por lo general mas bajos en el mes de septiembre, no obstante el punto mas bajo este año fue de 401 ppm. Es posible que todavía no hayamos alcanzado los niveles mas bajos de CO2 del 2016, pero esta probabilidad es extremadamente débil. […]
Teniendo en cuenta esto, podemos deducir que el cambio climático tendrá efectos permanentes sin duda catastróficos :
Extinción masiva
No hacen falta explicaciones suplementarias. Aún si es difícil estimarla, la tasa de extinción es de 1000 veces más rapida hoy de lo que fue antes de la aparición del Homo sapiens. La WWF estima que 10.000 especies suplementarias se extinguen cada año. Un cuerto de las especies vivientes podrían desaparecer para el 2050.
La perturbación de la cadena alimentaria
Estrechamente relacionada con la extinción de especies, las cadenas alimentarias son susceptibles de ser desequilibradas de forma permanente en a medida que los grandes depredadores y sus presas desaparezcan. En el Ártico, por ejemplo, el aumento de la temperatura de los océanos tiene un impacto en el desarrollo de las algas marinas, que a su vez privan a las poblaciones de zooplancton, bacalaos, focas y oso polares de nutrientes esenciales. En el curso de los últimos 50 años, las temperaturas promedio en Alaska y el Oeste de Canadá aumentaron de alrededor de 7°C.
El aumento del nivel de los océanos
En un futuro próximo, los humanos, entre otras especies, se verán afectados por el aumento del nivel del mar de manera abrupta. A medida que se derriten los glaciares, el patrón de las costas sera modificado, el océano tomara posesión de las Tierras y las comunidades tendrán que verse forzadas a desplazarse. Para el 2100, 13 millones de personas abandonaran sus localidades para cederle el lugar al mar. En ciertas partes del mundo, como en el Oceano Pacifico, por ejemplo, tal fenómeno ya ha comenzado. Los científicos estiman que aún si las temperaturas dejan de aumentar, este fenómeno resulta irremediable.
Acidificación de los océanos
Considerado como uno de los principales indicadores de la salud de nuestro medio ambiente, la acidez de los océanos ya ha borrado ecosistemas enteros. Los océanos del planeta absorben permanentemente el exceso de CO2 en la atmósfera, lo que disminuye su pH y acidifica las aguas. Como resultado de esto, vastas exenciones de coral, esenciales a los ecosistemas, como la Gran Berrera de coral en Australia está muriendo. Incluso si los pólipos de coral pudieran todavía echar raíces y volver a crecer en los arrecifes, los científicos preven que su destrucción dejará huellas indelebles de forma duradera en los ecosistemas acuáticos. [NdT : “Descubrimos que, en promedio, 35% de los corales han muerto o se están muriendo en 84 arrecifes que estudiamos en las zonas norte y centro de la Gran Barrera, entre Townsville y Papua Nueva Guinea”, alertó el profesor Terry Hughes, experto de arrecifes de coral . “Es la tercera vez en 18 años que la Gran Barrera de Coral vive un episodio grave de blanqueamiento debido al cambio climático, y el episodio actual es más extremo que los constatados en el pasado”].
Sarah Emerson
Nota : Los hipervínculo originales de los textos anteriores llevan por lo general a fuentes en lengua inglesa. Si deseas contribuir con alguna traducción escribenos a LePartage_es@protonmail.com .
Traducción-Edición ; Santiago Perales